Оценить:
 Рейтинг: 0

Heath's Modern Language Series: Mariucha

Год написания книги
2019
<< 1 2 3 4 5 6
На страницу:
6 из 6
Настройки чтения
Размер шрифта
Высота строк
Поля

Pocho. Perdone vuecencia… pero…

Don Pedro. Es mucho molestar… ¡Es grande impertinencia…!

Pocho. Necesidad, señor. Soy un pobre.

Corral. Paciencia, Pocho. Puedes volver…

Don Pedro. Cuando se le avise… Espere… (Se sienta en el sillón.)

Pocho. (Con entereza.) Podré alimentarme de tronchos de berza, de cortezas de chopo; pero no de las buenas palabras de vuecencia. Págueme, o de aquí me voy al Juzgado municipal…

Corral. ¡Pocho…!

Don Pedro. (Variando de tono ante la amenaza.) ¡Qué injusta desconfianza!… Pocho, venga usted aquí. (Llamándole, cariñoso.) Mi buen amigo… (Le toma la mano.) ¿Cómo puede dudar…?

Pocho. No es duda, es pobreza.

Don Pedro. (Dolorido, con afectada mansedumbre.) Vaya, vaya, sosiéguese el buen Pocho. (Dándole palmaditasen la mano.) Y no dude que, con el pago, tendrá una buena gratificación… Es muy justo. (Entran por el fondo Filomena y don Rafael.)

Pocho. Yo cedo a vuecencia la propina si hoy mismo…

Don Rafael. ¡Pocho…! (Con un castañeteo de lengua como el que se usa para echar a los perros, le despide señalándole la puerta.)

Pocho. Ya, ya… (Por D. Pedro.) ¡Cristo con él, con su madre y con toda su casta! (Vase rápidamente.)

Escena III

Don Pedro, Corral, Filomena, Don Rafael. La Marquesa de Alto-Rey revela menos que el Marqués, en su traza y vestimenta, la decadencia social. Viste traje negro elegante; mantilla.

Don Pedro. (Inquieto.) ¿Y María?

Don Rafael. En la plaza quedó con las de González.

Filomena. Entretenidita, viendo esos tipos de los pueblos, los pintorescos trajes, la animación del mercado…

Corral. (Saludándola.) Señora Marquesa, tengo el honor…

Filomena. Señor de Corral, mucho gusto… (Se quita la mantilla.)

Don Pedro. (Afectuoso, cogiéndole la mano.) Querido Corral, sea usted indulgente con mi desgracia, la cual no sólo me aflige a mí, sino a los amigos que vienen a verme, pues poco grato ha de serles oír mis lamentos, y ver espectáculos como estas embestidas del Pocho…

Corral. No se hable más de eso.

Don Rafael. Y sobre todo, no se exaspere, Marqués… Tómelo con calma… Ya vendrán días mejores…

Don Pedro. Yo confío en que el Gobierno…

Filomena. Por la Virgen, no me hables de Gobiernos…

Don Pedro. En la Providencia, sí: a eso voy. Quiero decir que Dios inspirará al Gobierno para que…

Don Rafael. (Aprobando.) ¡Mucho!

Don Pedro. También espero auxilio de las personas de nuestra clase. Imposible que permanezcan indiferentes…

Filomena. Bien podrán ser nuestros iguales o el Gobierno instrumentos de que Dios se valga para salvarnos. Pero en Dios está toda mi esperanza.

Don Rafael. Sí, sí: Dios…

Don Pedro. (Muy nervioso se levanta y se pasea por la escena.) ¿Pero a qué espera?

Filomena. Paciencia, Pedro. Para mirar por nosotros, allá quedó nuestro hijo Cesáreo…

Don Pedro. (Exasperado.) ¿Pero qué hace en Madrid Cesáreo, pregunto yo, si no revuelve el mundo por sacarnos de este pantano?

Corral. (Recordando.) Tengo el gusto de anunciar a los señores Marqueses que su hijo D. Cesáreo llegará hoy.


<< 1 2 3 4 5 6
На страницу:
6 из 6

Другие электронные книги автора Benito Pérez Galdós